Poesía hecha con sangre
que nace en mi corazón,
del sano amor, que es tan grande
que arrastra hasta la razón.
¡Mi poesía, mi amada!...
Siempre en tu búsqueda vengo,
porque yo, apenas si tengo
la fuerza para ser nada.
Prefiero marcharme ya,
a que pidas que me vaya
al cuerno con estas odas,
porque las ves malas todas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario